martes, 19 de enero de 2010

Echando de menos el verano



Entre baños escurridizos de semana en semana, con frio y sesiones mediocres va pasando el tiempo. No hay tiempo, ganas, ansia ni fuerza para ir a la playa tanto como quisiéramos. Y cuando vamos... pues casi a lo que caiga. Van algunas sesiones mediocrillas en cuanto a surf se refiere, pero grandes en cuanto a conversaciones y cháchara esperando por las olas. Y digo yo: a ver quien se atreve a criticar a los ancianos mirando las obras, cuando te has pasado media vida sentado en una tabla en medio del mar esperando por lo que ha de venir. Y si vino, pues menos mal.
Pues nada, echo de menos el verano y ni el chocolate ni el world of warcraft es capaz de arrancarme la desazón del pecho y la manía de mirar el windgurú cada media hora. Además, el maldito Jack Johnson no hace sinó ponerme mal el cuerpo y cada vez que entorno los ojos o me tumbo a dormir no veo otra cosa que la playa de Cobas rompiendo con olas de metro perfectas. Derechas capaces de llevarte a ese mundo que solo nosotros conocemos. Esa Sangri-la húmeda, ese estado de la mente que hace que estemos como gilipollas todo el año sentados en la tabla, esperando. Por lo menos, los viejos que, a veces se pasan por la playa ya no dicen:-están locos estos romanos. Ahora sonrien y le dan a los hombros. Tal vez ellos sepan lo que es esperar por lo que ha de venir. Y tal vez echen de menos el verano. Como yo. Como nosotros.

Un saúdo y Aloha!

P.D. Visteis que chulo el cuadro ese? Lo encontré en Internet...

1 comentario:

Xabre dijo...

Hombre, bien aparecido!
No me contestaste el sms que te puse el día 30, cabronazo.
Queda pendiente ese baño, en la esquinita. Hoy no que llueve mucho. A ver mañana????
A mi el Jack Johnson ese también me pone malo. Pero sobretodo el Donavon Frankenstein.... aaaarrrrggggg